Después de muchos días hoy la he vuelto a ver...
La he reconocido enseguida, he visto su silueta de lejos, me ha alegrado no verla con ropa oscura como la última vez; llevaba una camisa blanca y tenía un aspecto tan angelical que me he estremecido al verla.
Me he acercado a ella y he intuido su sonrisa, no me ha hecho falta verla porque la mascarilla me lo impedía, pero sé que ha sonreído, sé que le ha gustado verme, sé que necesitaba hablar porque al quitarse las gafas oscuras he vuelto a ver sus ojos, esos ojos con los que he soñado tantas noches desde que la conocí.
Hemos hablado de su vida desde hace unos meses, de los cambios que ha sufrido, de su enfermedad, de sus limitaciones, de todas esas cosas que hacen de ella una persona que padece, pero sobretodo hacen de ella una persona especial, alguien con quién merece la pena conversar y olvidarse del mundo. Hoy he descubierto que está casada, que tiene dos hijos preciosos a los que quiere con locura y un marido lleno de miedos y temores que no puede entenderla, una persona que supongo sufre pero no puede ayudarla.. no puede ayudarla porque para ayudar a alguien como mi "amiga misteriosa" hay que fundirse en ella, entrar en lo más profundo de su corazón y permitirle que se exprese y se abra a ti..... y yo puedo hacerlo, yo entiendo su tristeza y veo en sus ojos su dolor pero también veo la fortaleza tan grande que tiene, las ganas tan grandes que tiene de vivir y sé que nada le va a impedir salir adelante.
Hemos hablado durante tanto rato que me he olvidado por completo de mi reunión de editores, esa reunión en la que teníamos que decidir el despido de varias personas de la empresa debido a la crisis, he olvidado todo completamente y me he sentido más libre que nunca.
Escuchaba sus palabras y no podía dejar de mirar sus ojos, esos ojos que refuerzan lo que pienso: que por una persona así vale la pena vivir.
No sé dónde vive, no sé cuánto rato camina para sentarse en esa piedra y "respirar" en el más amplio sentido de la palabra, pero no puede ser lejos......
Mañana volveré y si no está, recorreré esos caminos una y mil veces y si no la veo volveré mil veces más porque desde que ella entró en mi vida todo tiene otro sentido y sé que algún día la veré sin mascarilla, me mirará a los ojos y el cielo para nosotros nunca más se nublará.
Mi dulce amiga misteriosa..... hasta la próxima..no me abandones, yo siempre estaré aquí...
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